10 claves para cerrar la puerta a los ciberataques

Estas son algunas medidas fáciles de implementar y que pueden evitar un ataque informático que puede tener consecuencias graves

Son consejos de fácil implementación. Sin embargo, si los seguimos pueden evitar que suframos un ciberataque de consecuencias imprevisibles. 

  • No dejar lugar al azar

No podemos confiar en la suerte. Es necesario establecer una serie de normas y protocolos de seguridad básicos que deben ser conocidos e implementados por toda la plantilla.

  • Última versión

Es importante tener la última versión de los programas, ya que siempre contienen modificaciones que mejorar la seguridad. 

  • Instalar un antivirus

Es recomendable tener instalado y activo un antivirus, pero es importante concienciar a todos los miembros del equipo que este sistema de protección no significa que podamos olvidarnos del resto de consejos de protección. El antivirus nos protege, pero no hace milagros.

  • Ojo con los correos

Todo el mundo sabe que hay que extremar las precauciones con los correos que nos llegan y que son ‘sospechosos’. A pesar de estar concienciados, lo cierto es que está sigue siendo la puerta de entrada de muchos problemas de seguridad. Concienciemos a toda la plantilla de que se aseguren del riesgo que corren al descargar un archivo adjunto. Hay que fijarse en el emisor y en el dominio desde el que nos remite el archivo. En caso de duda, no descargar nada.

  • Contraseñas que protegen

No debemos tomarnos a la ligera las contraseñas con las que protegemos el acceso a nuestros dispositivos. La recomendación generalizada es que no siempre utilicemos la misma contraseña y que utilicemos una combinación alfanumérica. 

  • ¡Cuidado con los pensdrive!

Muchas empresas no les dan la importancia que merecen y no limitan su uso, pero el pendrive es una de las vías de contagio más habituales. Los virus viajan de un equipo personal, o de una tercera persona hasta uno de los equipos de la empresa. 

  • El teletrabajo exige nuevas pautas

El auge del teletrabajo exige hace que no sea suficiente con que las medidas de seguridad se respeten en el entorno laboral. Debemos concienciar a los miembros de la plantilla de los riesgos y la importancia de seguir siempre una serie de medidas de ciberseguridad. Estén en casa o en la oficina, incluso cuando está usando un ordenador personal que, en principio, no utiliza para el trabajo. Por esta razón es más eficaz enfocar la política de ciberseguridad a partir de concienciar y formar a las personas, ya que de este modo siempre y en todo lugar actuarán de acuerdo con los principios de una conducta ciberresponsable.

  • La formación es necesaria

Por todo lo indicado en los puntos anteriores, es importante que desde la empresa se establezca un plan de formación en ciberseguridad para toda la plantilla.

  • No señalar a nadie

Los expertos en ciberseguridad recomiendan que la dirección de la empresa no señale ni castigue a los miembros de la plantilla que hayan sido víctimas de un ciberataque. El efecto puede volverse en contra, ya que es posible que otros miembros de la plantilla decida no notificar en el futuro que ja sufrido el mismo problema. 

  • Contar con el partner tecnológico adecuado

Este punto puede marcar la diferencia. Un partner tecnológico adecuado servirá para garantizar un entorno seguro y la protección de los datos más sensibles de la empresa. 


¿Qué está haciendo la pandemia por la digitalización de las empresas?

El confinamiento, primero, y las limitaciones en la libertad de movimientos han generado una situación inesperada y transformadora en el mundo corporativo desde la gran empresa a las pymes

En la Semana Mundial Digital 2020 que ha organizado este mes de noviembre el Col·legi de Mediadors d’Assegurances de Barcelona, varios consejeros delegados y otros expertos en diversas materias que participaron en unas interesantes conversaciones sobre el futuro aseguran que la pandemia ha acelerado el proceso de digitalización de una manera tan sorprendente como relevante

De hecho, esta idea es una de las más repetidas cuando se analiza qué efecto dejará la pandemia en nuestro día a día. Es un fenómeno que no solo afecta al mundo de la empresa. En el plano personal, la digitalización también ha avanzado varias casillas en estos meses tan complicados. 

Probablemente, esta es una de las razones que está agigantando el impacto de la revolución digital que estamos viviendo. Un proceso que es muy anterior a la pandemia, pero que las condiciones de vida que ha establecido la presencia del virus se han encargado de agudizar. Si este fuera un fenómeno exclusivo del terreno empresarial o si se limitara a la esfera personal, no se estaría viviendo una aceleración tan exagerada de la digitalización. 

En el guion pre-pandemia, ya se contemplaba un avance de la revolución digital. Pasos adelante que serían especialmente evidentes en las grandes empresas y que, en cambio, no sería tan apreciables en el tejido de las pymes. La realidad ha vuelto a superar a la imaginación del mejor guionista, ya que la velocidad del cambio no ha hecho distinciones por tamaño empresarial. Por supuesto, la gran empresa está dando un salto enorme, pero las pequeñas y medianas empresas están haciendo una verdadera revolución y un inmenso esfuerzo para ponerse al día en el entorno digital. Una apuesta que no era tal, ya que el impulso proviene de la conciencia de muchos empresarios de que la digitalización es en el contexto actual una cuestión de supervivencia

Es difícil ponerle cifras a la magnitud de la transformación digital que estamos viviendo. Aunque en los últimos meses, han aparecido algunos datos procedentes de encuestan o de valoraciones de profesionales que conocer perfectamente la realidad de la evolución digita. Es el caso del CEO de la Escuela de Negocios ISDI, Nacho de Pinedo, que en una reunión con empresarios afirmó que tras el confinamiento “el mundo ha acelerado el equivalente a 6 años en digitalización”

Por otra parte, una encuesta de la consultora EY, el 72% de los ejecutivos reconoce que su empresa tiene en marcha programas de transformación tecnológica. Entre los datos que circulan en el ámbito de la macroeconomía, uno de los que más llama la atención es el afirma que más del el 40% del PIB europeo estará digitalizado en 2021

Así las cosas, habrá que pensar que la pandemia ha contribuido de algún modo a acelerar un cambio que todo el mundo veía como seguro. Quizás será uno de los aspectos más positivos de una situación tan terrible como la que todavía estamos viviendo. Conviene, no obstante, que las pymes no se relajen cuando la crisis sanitaria y las medidas limitantes asociadas sean cosa del pasado. La transformación digital no va a esperar por nadie.


Este es el plan de El Corte Inglés para ser un gigante digital

La enseña fundada por Ramón Areces en 1935 afronta un proceso de transformación para adaptarse a las nueva exigencias de mercado y los nuevos hábitos de compra

La transformación digital es un proceso delicado para cualquier empresa con independencia de su tamaño e incluso de la fortaleza y valor de su marca. Es un proceso delicado porque afecta a las que han sido las bases tradicionales del negocio, las claves de éxitos pasados y de su grandeza. Sin embargo, el tiempo no se detiene. Vivir en un momento como el actual, de cambio de paradigma, coloca entre la espada y la pared la viabilidad de negocios que no hace tanto eran todo un referente. 

Ese es el caso de El Corte Inglés, un gigante de la distribución, con presencia en diversos sectores, entre ellos el asegurador, que pasa por su mejor época. La compañía fundada en 1935 por Ramón Areces ha asumido que su futuro pasa por acertar con el proceso de transformación digital en el que se haya inmersa

No se conocen todos los detalles sobre las intenciones de la empresa española, pero lo que está claro es que en los últimos años se ha visto superado en diversos territorios como la moda, la alimentación, los viajes, … Y ahora, tras el relevo en la cúpula de la compañía, la nueva dirección esta decidida a recuperar el terreno perdido y demostrar que un gigante también puede transformarse con cierta agilidad.

Aunque se desconocen con detalle los planes de la enseña del triángulo verde, algunas cosas han trascendido: 

  • Captar talento digital

La primera es la dirección sabe que la marca está en la obligación de atraer talento con competencias sólidas en el ámbito digital.  Los responsables de la marca saben que cuentan con una plantilla envejecida y sin un perfil ni una formación que se ajuste a las nuevas necesidades. Al margen de captar a nuevos profesionales, también deberán formar a sus actuales colaboradores, o al menos a una parte, para responder a las nuevas exigencias.

  • La baza logística

Los responsables de El Corte Inglés son conscientes de que parte de la batalla se dirime en la capacidad logística para responder con rapidez a los pedidos. Amazon le lleva una gran ventaja y además conocen las claves del negocio como nadie. Pero la empresa española espera que su amplia presencia en todo el territorio nacional le permita tejer una red competente y ágil para plantar cara a sus principales rivales.

  • Reorientar el negocio financiero

Quizás recordando sus propios éxitos, pero también fijándose en la política de Amazon y Google, El Corte Inglés tiene intención de relanzar y reorientar su línea de negocio financiero, en la que se enmarca la distribución de seguros. Se desconoce, no obstante, en que consistirá ese replanteamiento. Pero lo que es seguro, es que estará relacionado con la nueva estrategia digital de la casa. Algo parecido sucederá con el negocio de viajes, que se encuentra arrinconado por la pandemia.